Quiero una musa como tú

La palabra del mudo,

el verso lo insignificante hacia una musa,

el sentido de una mirada amigable,

tal cual dulce mirada encanta.

 

En el corazón eres como una deidad,

imaginando un instante de tu mirada,

el sueño en la realidad,

en la cordura de dos mundos amigos.

 

Adoro la forma de tu ser,

quizás porque eres como la estrella que buscas,

en aquel firmamento de ilusión imaginativa,

llena de jolgorio en razón de un cariño.

 

El cariño que lleva impregnado tu nombre,

que a pesar del poco tiempo que os conozco,

sumo el fulgor de un admirador,

en la vanidad de mi corazón.

 

Al parecer te idolatro,

en la algarabía de mis sencillos versos,

simplemente escribiendo para tí,

solo para tí como mi musa.

 

Que lindo sería tener una musa como vos,

tener que escribir sin medida,

recorriendo el mundo imaginativo a tu lado,

sin que alguien me lo impida.

 

Como decir tantas palabras bonitas,

en un sin fin de letras,

desenfundando mi inspiración,

para pedirte que seas mi musa.

 

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