Tú, mi columpio

Subí, después de pensarlo durante horas,
poco a poco, hacía arriba, hacía abajo.
La subida, lo mejor, ese sensación en la tripa,
la bajada, vértigo, deseando subir de nuevo.
Ya no quiero bajar de mi columpio, ¡me siento bien!,
agarrado fuerte no quiero soltarlo, ¡es solo mio!.

Mi columpio, eres tú, con lo bueno y lo malo.
Que bonito cuando estamos arriba, ¡que bello!,
y la bajada acerrado a tu mano, solo es esperar a subir.
Pero tú, mi columpio, eres especial, porque permanece siempre arriba,
aunque en las bajadas me quiera bajar, se que luego: ¡me siento bien!.

Sube, baja, y mi columpio nunca para,
de mi columpio nadie se baja. Te amo

Related Articles

Responses