Robándote una sonrisa.

Esas lámparas de techo
están demasiadas altas
de madera sirvieran para el fuego
no iluminan nada.
Yo veo bien lo que quiero
te clavo constante la mirada
tu espalda me seduce suficiente
más deseo verte la cara.
Qué vuele el descaro
el cuscurro de pan mensajero
«dese la vuelta su merced
qué anda ansioso el caballero».
Ya estás de nuevo comigo
me arropas con tu sonrisa
ya me hablas sin decirme nada
ya me viene tu dulce brisa.
Tu piel me castiga escondida
tus ojos me gritan alto
«estoy aquí, no me he ido»
tan sólo te estaba soñando.
Has notado en tu espalda?
sentías en tu espalda algo?
date la vuelta, aprovecha
que tengo encendido el descaro.
Aún sea clara la luz del día
que no me llevaré a engaño
la niña que de mí se esconde
la tengo sentada a mi lado
no me habla, es prudente
no se gira por si se notare algo
he vencido nueva batalla
otra sonrisa le he robado.
Quiten feas cestas luminarias
no es necesario alumbrarnos
la luz se espande y brilla sin esfuerzo
no veis que unidos estamos?
La niña que está de espaldas
tiene su núcleo imantado
atrae con extrema fuerza
los polos de mi artesonado.
Ains! qué será de mi alma
si estoy a ti amarrado
ausente pudiera tu física presencia
y contigo siempre, sin embargo

Related Articles

Responses