RECUERDO CONSTANTE

Heme aquí, cual Prometeo, pero sin hazaña
Atado con las cadenas del presente a la piedra del pasado distante,
sufre mi alma atormentada cual hígado sangrante
Siendo torturada por el águila del recuerdo constante
Clamo entre gritos internos por un día de paz en el mañana

Me encuentro todo el día atado,
aunque no siempre estoy consciente de que tengo cadenas
Es por esto que en los efímeros momentos de calma
El subconsciente de mi mente impaciente aguarda
Entonces surgirá la duda ¿qué aguarda?
Los aleteos próximos del águila al final del alba

De repente y cuando menos pienso en ello,
vuelve el águila del recuerdo constante
Empieza a desgarrar mi alma con su pico de errores punzantes
Y entonces los reproches empiezan a brotar como sangre
Sufre mi alma agonizante, sufre mi hígado sangrante
Obra del recuerdo constante

Related Articles

Responses