LXXII
Este corazón es un órgano vestigial.
Rodeado de alambre de púas y oxido.
Seco y marchito, un edificio abandonado,
Uno que ya no es necesario.
Lo he puesto en venta, solo se usó una vez.
De estado promedio a malo.
No funciona, pero puede exhibirse,
En las oficinas de un funerario.
Podría ser la lluvia en una de sus ventanas.
Quizás una hoja de otoño muerta en el suelo;
Una bolsa de gatos tirados al río,
Aunque ya se hayan ahogado.
Sebastian Crugley (scrugley.carrd.co)
LXXII forma parte del poemario Oceanos de Cemento.
Responses