LA PALABRA

LA PALABRA

Por embustero y cobarde
Hoy no te dedico mi canto
¡Oh silencio¡
Debiste decírmelo
Sin andanzas,
La verdad siempre
La verdad desnuda
Justo como hoy la encontré
¡Calla¡ … ya no digas
Resígnate a lo que eres
Silencio
¡Nada¡
Y escucha ahora lo cierto
Lo indubitable
Lo único que existe
Es la palabra
De adentro hacia fuera
Primero está
La palabra
Sacerdotisa y diosa
A continuación
El hombre,
¡otra palabra¡
Luego más hombres y
Ya en la periferia
La palabra que encierra
Que lo dice todo
¿Caes ahora en la cuenta?
Éste no es nuestro mundo
Sino el de las palabras
Escritas
Oídas
Pensadas
Cada una solemnemente
Pronunciada
O más bien
Transportada por el hombre
Que es tan sólo el camino
Imaginado
Cuán cierto es que el hombre
Es comunicación
Si a través de él
Platican las palabras.
Continuamente
Unos labios son forzados
Y la palabra
Un ser viviente
Llora
Ríe
Canta hasta el cansancio
Su propio nombre que es:
Palabra
Pregunta y respuesta
Palabra
Oración y oráculo…
Se suceden los cambios
Y al atardecer, ella
Se recuesta en un papel
Con el llanto transformado
En rasgos que se enlazan
Y parecen significar
Frases
Oraciones
Ideas;
En suma:
Un libro es una reunión
De palabras enquistadas
Y ávidas de ojos
Que las miren.
Y así
La palabra se alimenta
Hasta que llegado el día
Se proyecta
Perpendicular al polvo
Hacia el vacío
Y lo llena de gritos
Llamando a sus esclavos
Que acuden
La pronuncian
Escriben
Oyen
La amamantan
Y ella recomienza.
Siempre así:
Alrededor de sí misma
Imposible comprenderla
Pues carece de significado
Sólo es
La palabra.