LA MUERTE QUE LIBERA

¿Realmente sirve la vida de algo?
La cura para tal demencia tiene un solo nombre…
La muerte es la que nos libera de este cruel encierro.

Quién diría que nuestro destino fatal sería también
nuestra llave de esta cárcel para los sentidos.

¿Por qué entonces seguir?, ¿por qué seguir la lógica natural?
Nacer, si al final, expulsado de un hogar estoy…
Crecer, para que, si viejo no quiero ser…
Reproducirse, solo es una matemática, solo un instinto…
Y MORIR, si la liberadora, la que nos lleva afuera…

Pero entonces no tiene sentido,
¿Por qué nos aferramos a vivir?,
si toda, una ilusión es

El alba ha llegado y el sol brilla en lo alto,
pero mi mente de la oscuridad no ha querido salir.

Parar, eso es lo que quiere en este día mortal;
detener mi mente, un tiempo sin tiempo,
en el que no tenga que pensar que todo es perecedero,
que mi imagen no se diluirá en la siguiente estación.

Llanto es lo que mi alma quiere gritar,
pero mi cuerpo está cansado, no he dormido
y eso no ha sido una lamentación,
sino un reclamo;
quiero dormir, de aquel ensueño que me lleve a ti.

Oh blanca deidad, destructora, odiosa fantasía…

Todo lo que dios dicta es solo entonces un cúmulo de alegorías

Quiero descansar, dormir sin dormir…
Quiero un tiempo sin tiempo…

Donde no exista el anterior y nos distraiga el devenir…

Quiero morir sabiendo que estuve a punto de rozar la verdad,
no es mi intención abandonar,
sino por lo menos haberlo intuido.

Rareza, lo que mi corazón siente.

Pero todo está escrito, no hay desvío; ni otro camino.

Qué cárcel he descubierto en esto de vivir
qué oscuro paraje es el destino,
y luz cegadora es al final, es la muerte que nos libera.

eaflosa
24/08/14