Hace frío

La noche cae mientras alzo mi mirada tènue
No hay osa mayor que resista mi desasosiego
Las paredes gritan y las ventanas no escuchan
Las cortinas disuaden la luz de mi alma.

Me quedo a solas con la oscuridad
Tan fría que hiela mi alma y congela las horas
Tan fría que mi amaina mi calma sin demora
Tan fría que hace migajas el pastel de mis ojos

En pleno duelo contra mis facultades
En medio de un desierto árido donde las dunas son las dudas
Estoy esperando un rayo que rompa el cielo monótono
Espero un relámpago que acabe con la infamia.

Pero que es lo que espero si mi piel es de madera
Madera de fracaso, de tal palo tal astilla
Y mi corazón hace tiempo que yace en una caja de pino
Doblado y mordido por la lujuria de tu mirada.

Mi corazón te pertenece, y asi es como ha acabado
Junto los demás corazones que no merecieron un dueño
Si es que estos deben tener uno
O si es que en realidad ni tan solo lo tenemos

Encontrar el amor, casarse, hijos, obligaciones
Eso es el significado del amor?
No existe ni siquiera una versión de este más esperanzadora?
Que casar y hacer promesas y llorarte sin demora

Pues si así es lo repudio a todas horas
Si asi es me caso con mi cuello
Cansado de aguantar mis malos días sin condena
Que arrastra las cadenas que en mi vida me pusieron

Sentado en el espigón veo pasar los navíos
Hormigas en la lejanía, osos hormigueros de cerca
De mismo modo que los seres humanos
Pues la confianza está condenada a la decepción

La decepción a la soledad, la soledad a la necesidad de encontrar a alguien
Ese alguien que antaño fue decepcionado y necesita encontrar a alguien
Ese alguien que un día tuvo confianza en otro
Ese otro que decidió acabar con el dolor suyo y ajeno y acabó con el sufrir

Una vez, sentado en un banco de la estación de la locura
Vi pasar un tren como plegaria de la cordura
Tropecé con el dolor que me producía y caí en las vías
Se escapó el tren que no he cogido en mi vida.

Son las 3:30 solo en la inmensidad de la agonía
Queda poco para que amanezca o poco para ir a dormir
Pues paso de convivir con la luz y sus pupilos
Si solo me lanzan piedras que me rompen las pupilas

Asi que, escuchando ya como canta el gallo
Voy a mi corral propio a ponerme mascaras y risas
Esperando que se cierre el telón con el caer del sol
Y envejecer fumando y bebiendo con las caricias suaves de la brisa.

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