Engaña

Intuyendo que me alejé de la marea brava de su dulzura,
Sosegadamente, Rosando sus labios con los míos,
La sangre me calentaba y aquella no sentía nada
Simplemente por el placer…
Me mentí a mi mismo,
Y aquella mujer
Me dejó con optimismo.

Simplemente dejar que las olas pasen,
a través del abismo del destino perverso.

El humo opacándonos como gaviotas entre la niebla,
nos mantenía cerca pero nunca juntos,
tal vez no fue amor,
tal vez no fue cariño,
tal vez fue que a esta temprana edad,
nada puede pasar…

¨Tal vez me engañé, y es el riego que correr¨
Sin saber a que dirección ir,
sin saber que hacer,
sin saber… que sentir.