EN EL FILO DE ESTAS LÍNEAS

EN EL FILO DE ESTAS LÍNEAS

A pies descalzos,
en la soledad de una noche sin bandera
me encuentro devorando el silencio
que vuelve con su eco desbordado.

Te recuerdo,
entre la arena de una muralla sin nombre
y renuncio al olvido.

Escalones de madera
bajo tu delicada piel canela
dando pinceladas al ocaso,
creando el tono adecuado
con el sonido entrecortado
de tus pasos.

Vuela tu velo blanco,
como vuela el sueño intenso,
en el marco de un levante
entre mis manos.

Suena sur sobre las sombras
y María… ¡Dios mío!
¡Que bien te nombra!

Con la sal en sus pupilas,
descendiendo entre las aguas
para acariciar mi pelo,
en esta noche
dónde tiempo,
sombra y arena
tienen tu nombre,
y con el tono rosa
que mil mariposas
dibujan un segundo nombre
regreso a la aldea donde la luz
decora los sueños.

Donde los sueños te nombran,
donde ya mi llanto no existe
porque, siempre
sigues conmigo…
… en mi memoria,
en mi piel,
en el cauce acuoso de mi alma.

Añoro el roneo,
el pecado de un sofá sin confidente,
de una ventana celada,
una cama maltrecha
desbastada en la batalla.

Extraño los relojes sin tiempo,
las horas seguidas
y los amaneceres creados
para tenerte dormida en mis brazos.

Y ahora,
cerrado los versos,
nublando el poema
te dejo un sitio recostado
en el filo de estas líneas
para volver a sentir
la libertad de tenerte.

Buenas noches… vida.

Luis Endrino Fuentes ©️