Dos y media vida

Respiro, y me sumerjo en tu recuerdo,
me ahogo y me pierdo.
Volveré a soñar sobre las mantas que arropan mi cuerpo,
volveré y diré que siempre has estado aquí.
No huyas, no puedes escapar de nuestro inminente encuentro,
así podrán pasar los años, pero no los daños.
Mi alma podría estar partida y jamás escaparías.
Ahora mi mente está ahogada y la almohada mojada.
Volveré cuando el tiempo se eche detrás.

Related Articles

Responses