Día uno

Estuve buscando dentro del mundo de internet un lugar para escribir. No soy buena en esto, pero me libera hacerlo. Encuentro tranquilidad cuando puedo expresar todo lo que siento, y luego de un tiempo, me gusta volver a leerme. Mi escritora favorita soy yo.
Cada tanto, me hundo en pensamientos que no logro entender, en preguntas que no logro responder y en ideas que no logro concretar. Soy un montón de cosas inconclusas, pedacitos de algo. Algo o alguien. Tal vez soy el resultado de las cosas que veo y escucho, y de las personas con las que me relaciono. No creo buscar un «quien quiero ser», simplemente sucede. Posiblemente no sea una persona muy llamativa, de hecho suelo pasar desapercibido pero no es para nada molesto. Me gusta no sobresaltar. Soy un mundo de pensamientos, pero nadie tiene que notar eso. De todas formas, hay momentos en los que necesito dejar archivos de lo que pienso, vivo, siento y soy día a día. No para que me lean, sino para leerme. Me satisface leer aprendizaje en mi, me emocionan los cambios. Hoy escribo esto, y tal vez en una semana me parezca una boludez o me resulte la mejor decisión que he tomado. No lo sé, no intento obtener respuestas a la primera. Dejo que las cosas pasen.
Encontré en este sitio un espacio para poner un título, y un espacio para escribir. También noté que se llama «Poetalia» y no se escribir poemas, creo que esto funciona como un blog de notas para mi. Es posible que vaya aprendiendo con el paso de los días y también es muy posible que lo abandone.
Por cierto, que lindo es leer las palabras que tienen los demás para decir. He pasado horas disfrutando sus poemas. Hay gente que nace para esto, y es hermoso. La belleza de las palabras bien utilizadas me dan ganas de aprender a escribir correctamente una poesía.
Día uno, internet es muy mundo de cosas magnificas, y otras no tanto. Me quedo con las magnificas, como este sitio. Ojalá perdure mucho tiempo por estos lados.