DESEOS

¡Oh! Quien tuviera el atrevido vuelo como el potente vuelo del cóndor
Para salvar la cima que se opone
Que se opone, mi bien, ante los dos!.

Quien pudiera cruzar ese rayo
Que atraviesa veloz la inmensidad;
Para poder también esa distancia
En un solo segundo traspasar.

Quien pudiera cual ángel de los cielos
Hasta el fondo de tu alma penetrar;
Ser contemplado por tus labios bellos
Y poderse en tu pecho reclinar.

Y poderte decir lo que te adoro,
Lo que sufre también mi corazón;
Lo que pienso en las horas de dicha,
Y mostrarte el ardor de mi pasión.

Y que uniendo después los corazones
Se fundiera la vida de los dos;
Y esas palabras jamás borradas
Serán del todo del corazón.
                                   
                                      Belén Lema.