Cuero curtido

Pasea con tiento un viejo,
se dobla con el tiempo,
para continuar viviendo,
y paso a paso, da el paseo.
Las curvas de su cuerpo,
trazadas con esmero,
esos pellejos bellos,
y esos andares lentos,
esos frágiles huesos,
el blanco y escaso cabello,
los pliegues que azota el viento,
y el bastón dándole sustento.
Sí, está vivo por dentro,
sí, elige seguir sintiendo,
el grave peso del tiempo,
a cada paso su cuerpo,
los lamentos de sus huesos,
los rígidos ligamentos,
y escuchar el ritmo interno,
de su corazón latiendo.
Será pasado este paseo,
pero no pasará en vano,
seguro será olvidado,
también será recordado,
volverán otros a darlo,
de jóvenes y de ancianos,
y aún será imaginado.
Claro que no es humor negro,
es un buen cuadro bello,
hecho por un pintor viejo.