Cojonuda historia XVII

La luna parecía una puta pelota o una bola de queso
Enorme y brillante en el firmamento
Mientras ella y yo volvíamos a casa
Con cervezas y comida del «Crush chicken”
No teníamos exactamente idea de lo que hacíamos
Pero juntos la pasábamos bien
Después de cenar nos tumbábamos sobre la cama a mirar la tv
-En ese entonces aun miraba tv-
Y en pequeños lapsos de tiempo parecía que el cuarto estaba solo
Pero para nosotros no era así
Era bueno girar el cuello y verle ahí, ver sus bragas negras
Mirar su rostro inocente, ¿cómo podría estar una zorra bajo esa piel?
Despertaba a mitad de la madrugada cuando sus manos
Se posaban como búho en sus propios senos
Y arrimaba sus nalgas hacia mí
Entonces la noche se volvía joven y no importaba mucho si afuera llovía
La habitación estaba caliente, ella estaba caliente, y yo también
Era el infierno ahí
Esa mujer era una ninfómana, una locura
A decir verdad también por eso la quería
Desde entonces creo que las flacas tienen dinamita en los huesos
No la extraño, aunque quisiera darle duro como ahora a cada una de las teclas
De esta mi vieja máquina de escribir
Voy a fumarme un cigarrillo y a beber cerveza
Porque a esta hora de la madrugada el «Crush chicken” no tiene servicio

Related Articles

Responses