Carta a su majestad
Un pequeño rey con su silenciosa orden nos confinó. Convirtiendo a todos en iguales. En súbditos arrepentidos, en plebe. Ese minúsculo pero de letal majestuosidad…
Un pequeño rey con su silenciosa orden nos confinó. Convirtiendo a todos en iguales. En súbditos arrepentidos, en plebe. Ese minúsculo pero de letal majestuosidad…