Aquí dentro

Mecanismos y engranajes,
humanos y naturales,
los segundos son ciegos,
los primeros son tuertos.
Conocer el mecanismo
puede serte de ayuda
para mantenerte vivo,
para evitar el martirio,
para olvidar el exilio,
para poder ser tú mismo,
y no perder el equilibrio,
para buscar el resquicio
a través del cual ver la luz,
que mantiene viva la vida,
y alivia la injusta herida,
para no acabar muerto,
ni abatido ni perdido,
para seguir el camino
libremente comprometido.
Mantenerte vivo y despierto,
mantener el pensamiento
libre de todo tormento,
ya sea propio o ajeno.
La libertad te enseña
a decir aquello que deseas
de forma hábil y certera.
Inmenso como el universo,
es nuestro pensamiento.