Las palabras solo son letras que al llevárselas el viento Eolo Dios.
Que ordena el clima y usted a mi se arrima.Despejándose sus malos pensamientos.
Quiero,deseo,se que debo enamorarla como en los viejos tiempos.
Con palabras que el viento arrastró hacía su alcoba.
Para despertarla a usted mi Loba.
Cual melena de oro al viento.
Eolo encargándose está de volverla a peinar.Ponerla bella,seductora,exótica fruta prohibida.
Se de buena tinta que usted será pronto parte de mi vida. Para lograr enternecer su fracturado corazón yo seré su humilde Don Juan Tenorio.
Recitándola desde su balcón al proceder de antaño conquistador de amores. Haré con mis tiernas palabras que se desvanecen viejos temores.
De corazones ultrajados por maltrechos amores no correspondidos.Quiero y deseo darla mi abrigo. Si he de ser su Caballero fiel.
Cual escudero protegerla del Dragón que escupe sapos y culebras. Y no fuego. Pues las palabras mal conjugadas y no bien deseadas.
Dañan las almas sagradas de solares llevados a los altares.
Sea usted la musa de mis sueños no infiel.Hágame crecer como hombre y bregar conmigo pendiendo de un hilo.
Los avatares a que nos enfrente el destino.
Deme la oportunidad.No se la pido,¡se la suplico ya!.
Usted mi señora se que desde su tierna alcoba,días,madrugadas,y noches usted en silencio llora.
No por ello menosprecio a la mujer que de cualquier hombre se sepa defender.
Más no todos los hombres semos del mismo saco. Pues mujeres muchas hay en el saco en el que a todos los hombres se nos ha de meter.No es someter.
Maltrato hacia la mujer.
Con ello no pretendo ser descortés.
Sino explayar mis más profundos pensamiento e inquietudes.
Ensalzando al menos mis virtudes.
Que en palabras espero quédense y no marchen hacia otros derroteros.
Que una mujer sea de la edad que sea quiera protección de uno, o algún hombre bueno,
de buen corazón no quiere decir que no se sepa defender, sino que a veces siendo joven es de alma antigua.
Y busca a parte de protección que la amen,quieran y deseen de todo corazón,sin temores, sin terrores,ni rencores,sin ultrajes ni cobardías.
Y sin abusar en demasía de la tecnologías. La amo como antaño se amó. Con el cuerpo, con la mente, con el alma, y ante todo y sobre todo con el corazón.

amores literarios de los de antes.
¿Se deberóia amar como antaño, amores románticos y aunque a escondidas. El uno al otro se abriga. Protege. Y teje sus historias de amor, deseos, pasiones, y calor.