A MIS POETAS AMIGOS
A mis amigos de letras,
a mis poetas de ensueños,
a mis lectores y leídos,
a los más alegres,
a los más sufridos,
a los que comparten
sus secretos
de amantes errantes,
o gritan al viento su amor
por la vida,
a todos mis queridos quijotes,
a mis bellas dulcineas,
a quienes el viento desordena
papeles y la lluvia destiñe colores,
a todos a quienes la noche despierta
y el sol arrebata descanso,
A los locos preciosos
de libros por escribir,
con historias verosímiles
o sonetos sangrados,
a todos quienes a mi lado mantienen
sus lapiceros en ristre, y a combatir nos
lleva la ilusión de la musas,
de ver en escritos sinceros
sus dictados frenéticos de colores
y sombras perpetuas.
A mis amigos poetas,
o aprendices de orate,
qué más da,
si la lluvia de igual forma cae
sobre cubetas de ilusiones paganas,
aprestadas a escapar y beber todas
las gotas de los cristales,
las gotas de los portales
y correr sobre barriales
a encontrar el sol de frente,
el que nos quiebre la mirada
en mil destellos de estrellas,
alucinando felicidad,
enamorando tristezas.
A mis amigos poetas,
que dé humano tenéis mucho,
no nos sirven poemas vacuos
para mentes plenas, queremos copas
de vino, hogazas de pan y mucho papel
sobre cielos firmes,
que de tan amados amigos,
saldrán muchos versos sentidos.
Andrés de lua
Me gustó. En especial lo de «sonetos sangrados», como relacionando la vitalidad de la sangre con la poesía.