34.- A TI

A ti, por tu forma de vivir,
yo te quiero, quiero.
A ti, por tu forma de hablar,
yo te quiero, quiero.
A ti, por tu forma de mirar,
yo te quiero, quiero.
A ti, por penetrar en mí,
tan rápido, que ni lo sentí,
yo te quiero, quiero.
A ti, por limpiar todo lo malo
que en mi vida dejé existir,
yo te quiero, quiero,
y por ti yo muero, muero.

Tú lo has sido todo para mí,
y me has dejado, vida mía,
roto en mil pedazos el corazón,
tanto como te quería.

¿Por qué me haces esto a mí,
si yo nunca nada te hice a ti?
Yo todo a ti te entregué,
y tú a cambio ¿qué me has dado?

Sólo pena en el corazón,
desesperación y olvido.
Tan buenos amigos que fuimos
y mira ahora, ni nos saludamos.
Tanto que yo te quería
y ahora tan solo me has dejado.

Cuanto yo daría
por volverte a tener,
querida amiga mía,
aquí, junto a mi lado.

Que no dejaría perder,
por ver toda tu vida,
pasar unida a la mía.

Cuantos años de mi vida ofrecería,
por tener tu corazón junto al mío,
unidos los dos un sólo día.

Que feliz era con tu alegría,
y qué triste estoy ahora
que he perdido toda tu compañía.

Que dulces fueron los días,
que tú y yo éramos poesía,
y que amargos son ahora
que no tengo toda tu vida.

Que cortos fueron los momentos
en los que la poesía,
fluyó espontánea como la vida,
y que largos son ahora,
en los que la poesía es amarga
como lo es la vida mía.

Que tesoro más grande he perdido
al no tenerte junto a mí,
en las tardes de verano,
y por eso y por mucho más
yo muero, muero,
diciendo cuanto es mi amor,
cuanto te quiero, quiero.

Related Articles

Responses