31.- CUENTA CONMIGO

Si alguna vez adviertes,
que te miro a los ojos
y una veta de amor
reconoces en los míos,
no pienses que deliro,
piensa simplemente que puedes
contar conmigo.

Si otras veces me encuentras,
huraño sin motivo,
no pienses que es flojera,
igual puedes contar conmigo.

Pero hagamos un trato:
“Yo quisiera contar contigo,
es tan lindo saber que existes,
uno se siente tan vivo”, y cuando
digo esto, no es para que vengas
corriendo en mí auxilio,
sino para que sepas que tu
siempre puedes contar conmigo.

Si alguna vez adviertes,
que mis ojos una lágrima
escapar dejan, no lo dudes
y ven a acompañar mi olvido,
que mi alma dejará escapar,
los más dulces versos de amor
que jamás tú hayas de escuchar
en la boca de un desconocido.

Si alguna vez sientes mis ojos
que se clavan en ti
e intentan desnudar tu cuerpo,
no te vuelvas y déjame seguir
soñando mí sueño.

Si alguna vez notas
en mi semblante una huella amarga,
no pienses cosas raras, es el amor
que a veces es dulce, y otras,
golpea tan duro en el alma
que sus huellas quedan tan marcadas
y a veces el rostro masacran.

Sin piedad, el amor, te destroza la sonrisa
y las palabras de amor que de mi emanaban,
se convierten en amargas para la persona
que necesita toda mi alma.

En esos momentos que la vida
en llanto amargo se escapa,
en esos momentos acude tú a mí,
y deja que mi llanto humedezca tu hombro
y llora tu dolor junto a mí,
y acepta mi pequeño abrazo.
Dime palabras de amor
y consuela a mi pobre corazón,
que por conseguirte va llorando.

Si notas mi palabra dudar,
cuando la duda es por amor,
no es duda sino el dolor
que atenaza mi voz y no me deja,
expresar todo lo que ahora canto
y tú te vas sin saber, que te amo tanto.

Si el amor tarda en acudir,
no desesperes y ven a mí,
que yo te he de recibir,
aunque no sea el tipo de chico
que siempre te ha gustado a ti.

Si la duda penetra en tu corazón
y no te deja saber quién es tu amigo,
porqué no te vas al campo,
en soledad, entre los pinos
y entonces piensas un poquito,
que el que primero te ofreció su mano
en el momento que has caído
será siempre tu mejor amigo.

Si yo con mi poesía,
he de demostrar quién será
siempre mi mejor amiga,
es para mí muy fácil apuntar
en mi recuerdo tu nombre Soledad,
y entonces hacerte desandar el camino,
que los dos, a duras penas, hemos recorrido.

Si tú quieres saber quién será tu amado,
piensa en los versos de amor que te he ofrecido
y deja tu alma escapar
y escucha mi verso herido
que él sólo te llevará al lugar donde el amor
ha situado nuestro pequeño nido,
y allí seremos, los dos, una sola canción
en la que el amor será nuestro único amigo.

Si con todo lo hasta ahora dicho,
tú no confías en mí, como yo en ti confío,
sigue leyendo mi verso, haz el favor,
ya que con él entrego mi corazón herido,
que mejor prueba quieres de mi amor,
si esta es la única que se ofrece con valor.

Si alguna muchacha siente por mí,
todo el amor que por otro no ha sentido,
que venga a mí con el corazón en la mano,
que yo siempre he de querer,
a la que ame mi corazón perdido.

Si alguna muchacha tiene su alma
llena de problemas y amargura,
que no dude y venga a mí,
que siempre es mejor compartir
los problemas con un amigo.

Si alguna vez sientes tu vida morir,
como muere la rosa en el invierno frío,
acude tu a la fuente de mi vivir
y recupera tu vida junto a mí.

Si no encuentras personas para hablar,
por temor a la burla y a la farsa,
no dudes y acude tú a mí
que yo siempre te he de oír,
aconsejar y sentir
todo lo que te pase a ti.

Si en algo yo puedo disminuir
la pena que sientes en ti,
no dudes y vente para aquí
y se conmigo feliz,
y verás como con el olvido,
conseguirás que la sonrisa
vuelva a ti, como el pájaro
vuelve a su antiguo nido.

Si tú no confías en mí,
tanto como yo en ti confío,
pide lo que más quieras de mí,
que sin dudarlo todo lo he de dar
para conseguir todo lo que has pedido.

Si vives con la duda de mi lealtad,
ponme a prueba y comprobarás,
como sólo te quiero a ti,
y a ninguna he de decir,
todo lo que a ti te digo.

Related Articles

Responses