Estrella Solitaria

En calles desoladas, en caminos ausentes.
En playas desiertas, en ríos sin agua, en secos nacientes.
En montes sin árboles, en cielos sin nubes.
En mares sin barcos, ni peces, sin ninguna ola.

Encontré una brújula.
Que me guío a ti.
Que también estabas sola.
Como esa estrella sin planetas al su alrededor.

Dando su luz, su calor, pero nunca acompañada.
Perdida en su esplendor.
Abandonada en su resplandor.
Nadie giraba a tu alrededor.

Hasta que te vi.

Ahora estas siempre en mi mirada.
En mis pensamientos diarios.
En mis sueños varios.
En mis deseos tardíos.

En mi voluntad renacida.
En mi cariño no usado.
En mi amor rescatado.

En mi corazón iluminado.
Por un rayo de esperanza.
Por una señal, por un anhelo, corazonada.
Que nunca me dejo abandonado.

Ya en la soledad sentía tu presencia.
Mis lágrimas eran mi esencia.
La tristeza mi única vivencia.

Una mano sin asir.
Un corazón sin latir.
Un alma que no se podía permitir
despertar a un nuevo día.
Pues se entregaría siempre a la misma monotonía.

Pero ahora, el tiempo y el momento ha llegado
Seré tu planeta.
Seré tu cometa.

Sol, estrella, deja que estos deseos sean mi única meta.
Creo que no necesitaré más.

Porque tú serás la que busco en mis poemas.
A la que dedicare un único tema.
La que se convertirá en mi lema.

Ya no veré ningún desierto
Tú me harás estar siempre despierto.
Para contemplar y vivir en el amor de tu puerto.

Para navegar en tu compañía
No volver a sentirte en la lejanía
Ver llover y manar, crecer, remar
por el amor de tu mar.

Por el camino de tu mano.
Por el sendero hasta nuestro pequeño hogar.

Nada ha sido en vano.
Ni cosa del destino.
Ni creo en la magia del lugar.

Solo en el poder de la esperanza.
Solo en aquella vieja enseñanza.
De que todo ha de llegar.
Solo debemos esperar.

Solo, estuve, solo viví, solo, sol.
Y creo que tú no conocías a quien bañabas en luz.

Pensabas que todo era oscuridad, en tu mundo.
Por mucho que pesara nuestra cruz.
Hemos coincidido en este segundo.
Que quedara grabado a fuego en el tiempo.
Sellando, y abriendo las puertas a una nueva era.
A un capitulo, en el que todo lo que no tuvimos nos espera.