Espiral Imprevista

Sobre la frágil hierba
el sol carga la fatiga del viento
escondido en la montaña
en su sonora transparencia
humilde
lámpara mortuoria
Del alma
Atrapada
En el corazón
Pasajero
Del tiempo desnudo
En el recuerdo
De los íntimos relojes…

Rumores, ternura, suspiros, dolores,
días meses años
de ruiseñores espumas y brumas
de palomas espinas y desencantos
Flor fugaz de cálidas brumas
De los íntimos relojes…

A tres horas de viaje escoltando al sueño
van los párpados en fila por los surcados
caminos que siembran los campos de anhelos
Tejiendo a los siglos las sombras en las cúpulas
de jade, que ceden el paso a los prados azules
iluminados hasta donde la vista alcanza…

¡ Oh, espiral imprevista !

Porque el agua muere de sed
en cualquier lágrima
falsa y seca
con el otoño
sembrando
hielos…

En el último llanto del cielo.
Una
Espiral
Imprevista… ¡ Sobre la frágil hierba !.